Rubén, tú fuiste mi «MVP»

El almeriense suma 84 partidos con la camiseta del Deportivo Alavés

El Deportivo Alavés dio el pasado viernes  —Tebas, basta ya— ante el Valencia otro pequeño paso hacia la permanencia. Tras el partido, la cuenta oficial del club publicó, como cada jornada, una encuesta para decidir al «MVP» entre cuatro opciones —el máximo permitido por Twitter—. Édgar, Joselu, Lucas y Ely fueron los jugadores elegidos por el CM para la votación y, entre ellos, eché en falta al albiazul que, en mi opinión, más destacó sobre el césped y al que poco o ningún protagonismo damos generalmente.

Hablo, como el propio título os ha adelantado, de Rubén Duarte. Ese lateral izquierdo que «siempre cumple», «está correcto» y «sabemos lo que ofrece». Afirmaciones con las que coincido en la mayoría de los partidos, pero, que en noches como la del viernes, se me quedan cortas para un jugador que rozó el sobresaliente en defensa y que se incorporó al ataque en varias acciones.

Sinceramente, yo fui de los alavesistas que se posicionó a favor de la venta de Duarte en el mercado veraniego debido a la cuantía de la oferta, pero su temporada, que para mí está siendo de notable —salvo alguna «mano» de esas que se pitan hoy en día—, me ha hecho cambiar de opinión. Su constancia, trabajo, carácter y capacidad defensiva —además de su margen de mejora—, le han colocado en mi lista de intransferibles y, al mismo tiempo, de infravalorados. Sí, infravalorado, pero tranquilos, que lo sería en cualquier equipo.

En el fútbol actual, apreciamos más a los laterales por su faceta ofensiva que por la defensiva. Esto último, en parte, tiene su lógica —al final, siempre vamos a recordar mejor una potente carrera por la banda que un robo de balón—, pero es injusto para esos jugadores que, como el almeriense, trabajan en la sombra y se centran más en destruir que en generar —aunque cada día le vea mejor también en tareas de ataque —.

Personalmente, pasan las jornadas y cada vez soy más de Rubén Duarte. Estoy prácticamente seguro —aunque todavía le vea un pequeño escalón por debajo— de que tiene todo lo necesario para alcanzar esa posición de «emblema» que ostentan algunos de sus compañeros y que tan importante es para un club como el Deportivo Alavés.

Normalmente, este tipo de jugadores son realmente valorados cuando se marchan del equipo. Yo espero que en esta ocasión no sea necesario, que el club le blinde y que permanezca mucho tiempo en Vitoria-Gasteiz.